Coronavirus: Antes, Durante y Después
Llevamos ya más de diez días confinados en nuestras casas
por el maldito Coronavirus, y aunque lo importante es la emergencia sanitaria
en estos momentos, luego tocará preguntarnos qué es lo que se hecho mal y por
qué se ha actuado tan tarde con las medidas restrictivas de movilidad.
Durante estos días, se ha oído varias críticas sobre la
manifestación del 8 M y mitin de Vox, por no haberse parado a tiempo y por ser
un foco potencial de infección. Recordemos que Ortega Smith acudió con síntomas
al mismo mitin dando la mano a docenas de asistentes. Personalmente, yo también
creía que estos dos actos habían sido el detonante de la situación que, desgraciadamente,
tenemos hoy en día. Hasta que hace unos días leí un artículo, científico, pero
comprensible para todo el mundo, pero pone en duda que estos dos actos hayan
tenido incidencia en la situación de hoy (puedes leerlo pinchando aquí).
Pues bien, una vez dicho esto. Ahora viene lo duro, la parte
económica. Esto va traer una crisis brutal y, a mi parecer desde el gobierno se
está gestionando fatal, no todas las ayudas llegan a los autónomos como nos quieren
hacer ver. Lo que provocará que tengan pérdidas porque los gastos fijos se
tendrán que seguir pagando (suministros, alquileres, salarios, etc). Algunos no
pueden acceder a estas ayudas y otros están incluidos en los establecimientos que
pueden abrir en estado de alarma. Las clínicas de fisioterapia, algo totalmente
ilógico. Ello hace que no puedan acogerse a un ERTE, ahogándose más económicamente.
Y, por otro lado, restaurantes que no pueden acceder a las ayudas por tener
deudas con la Seguridad Social. Son dos casos que conozco demasiado bien por
personas muy cercanas. Espero que el gobierno rectifique en este sentido.
Por otro lado, al trabajador por cuenta ajena que se que sin
empleo si que tiene varias medidas buenas como que el de la prestación por
desempleo no se restará a que ya tiene acumulado, prologas automática de esta prestación,
dar preferencia al teletrabajo y la imposibilidad del despido por una reducción
del 100% de la jornada por cuidado de un familiar.
En el ámbito social, nos va a costar muchísimo volver a la
normalidad. Estos días lo he hablado con varias personas en distintas conversaciones.
¿Daremos dos besos al saludar? ¿Nos daremos la mano? ¿Nos abrazaremos? Seguramente
al principio nos costará más pero conforme se vaya normalizando la situación
volveremos a ser como siempre.
Ojalá salgamos pronto de esta…
Comentarios
Publicar un comentario