Situaciones Comunes que Vivo pero que me Joden que te Cagas

Después de toda una vida conviviendo con una discapacidad física (parálisis cerebral), de salir, conocer mucha gente y vivir situaciones de todo tipo. Hoy voy a compartir con vosotros todas aquellas cosas que, en cierto modo, me molestan o me incomodan como consecuencia de un trato diferente por parte de los demás, sobre todo de aquellos que no me conocen o que acaban de hacerlo.

QUE ME HABLEN DIFERENTE

Esto me pasa con casi todo el mundo que no me conocen o que acaban de conocerme, un alto porcentaje me habla como si fuera un niño pequeño o directamente como si fuera tonto y no me enterara de nada. Supongo que la culpa de ello será mi dificultad al comunicarme de primeras por mis nervios y quizás eso haga pensar que tenga una discapacidad intelectual. Algo que ni de lejos tengo.

QUE SE CREAN MI COLEGA DEL ALMA A LOS 5 MINUTOS DE CONOCERME

Algo que me ocurre muy a menudo, sobre todo cuando estoy de fiesta. No sé por qué ni me preguntéis cómo pero siempre se me acerca un borracho a ser super amigo mío cuando no le he visto en la vida. Vamos a ver, alma de cántaro, si quieres hablar conmigo hazlo como lo harías con cualquier persona, ni tengo confianza contigo para que me abraces ni para dejar a la gente que con la que estoy por atenderte a ti, porque me puede apetecer hablar contigo o no.

Otra cosa muy diferente es que vengan hablar conmigo de buen rollo y que me ofrezcan una conversación interesante o encontremos puntos en común. Ahí no me importa hablar con quién sea.

QUE SE CREAN QUE SOY UN SEMI-DIOS POR IR EN SILLA DE RUEDAS E INTENTAR HACER UNA VIDA NORMAL

Cuando me pasa eso me hace mucha gracia, de verdad. Tan solo por tener una discapacidad e intentar llevar una vida normal no me hace ni más ni menos que nadie. Tan solo  soy uno más.

Muchas veces me dicen cuando me ven de fiesta: “eh, felicidades por estar aquí”, “yo en tu lugar no podría”, “tienes un par!”. Todo esto sin conocerme, igual soy un hijo de puta (que eso no está reñido con tener una discapacidad). También me pasa cuando digo que tengo estudios superiores y trabajar. Ahora pregunto yo: ¿Haber conseguido eso teniendo una discapacidad me hace más que otro? Y si no la tuviera ¿seguiría siendo más que ese otro? Yo considero que no, tan solo he tenido unas series de adaptaciones en mi vida académica acorde a mi situación. Personalmente, lo comparo con alguien que lleva gafas o lentillas ¿sin ellas habría podido estudiar?

QUE ME GASTEN BROMAS DE NIÑO PEQUEÑO

Es algo me jode mogollón de verdad, como se creen que tengo discapacidad intelectual me hablan o me tratan como si tuviera 5 años…. Y voy para los 30! Sé que la gente no lo hace con mala intención, pero estas cosas si se hacen con más personas presentes, esas personas también creerán que tengo discapacidad intelectual. No sé si me explico, es una especie de efecto dominó.

Al hilo de esto, cuento una cosa que me pasó hace un par de semanas (no tiene mucho que ver pero ahí va):

Fui a comer a San Juan (Alicante) a un restaurante con 3 amigos. Turno de pedir la bebida, pido un tinto de verano como de costumbre en mí, el camarero nos advierte que lleva alcohol y que me puede afectar a no se qué mierda. Ya empezamos mal… Mi amiga le dice que no tengo discapacidad intelectual, que me hable “normal” y que no pasa nada, pero el colega sigue igual… hasta que llega un punto de la comida en el que estoy hablando tranquilamente y de repente noto unas cosquillas por la nuca, yo pienso “será alguien que conozco”, ¡¡¡Pero de repente levanto la cabeza para ver quién era, y era el camarero!!! ¿pero qué cojones…? En fin...

QUE ME TOQUEN LA BOINA NADA MÁS VERME

Normalmente, casi siempre llevo boina porque me mola y no sé porque la gente (alguna) tiene la manía de quitármela y dejármela doblada o, de cualquier manera. Vamos a ver, ¿a ti te gusta que te toquen alguna prenda complemento? Si la respuesta es no, ya somos dos.

QUE HAGAN COMO QUE ME ENTIENDEN CUANDO EN REALIDAD NO LO HACEN

Y dejo para lo último las dos más habituales, esta primera de ella me suele pasar aunque es cierto que cada vez menos. Cuando hablo gente que acabo de conocer es cuando pasa, están hablando  conmigo y hacen como que me entienden pero en realidad no tienen no tienen ni puta idea de lo que he dicho. Lo que no saben (sabéis) que eso se nota de primeras.

Ejemplos más comunes: cuando pregunto algo y me contestan algo totalmente diferente, cuando suelto alguna parida y simplemente asiente con un “claro, ya ves”, o cuando estoy preguntando algo y simplemente se me quedan mirando sonriendo.

Consejo gratuito: si no me entiendes dímelo y lo repito mil veces si hace falta. Si no, el que queda como un gilipollas eres tú.

QUE SE DIRIJAN A LA PERSONA QUE ME ACOMPAÑA ANTES QUE A MÍ

Y dejo para lo último, la cosa más común que me suele pasar, a mí y a las personas con cualquier tipo de diversidad funcional. La gente para hablar con nosotrxs se dirige a la persona que nos acompaña en ese momento. Vamos a ver (de nuevo), si estás hablando conmigo dirígete a mí. Que yo sepa invisible aun no soy.

En fin, todo esto me suele pasar…