A Veces Cuando Estoy Tumbado en mi Cama me Pregunto…
Dónde estabas en mi niñez cuando jugaba como un crío, me
gustaría poderte haber observado como crecías.
Dónde estabas cuando
imaginaba aquel ser perfecto que me haría sonreír.
Dónde estabas cuando me retozaba de dolor en mi cama por
amores no correspondidos.
Dónde estabas mis sábados de fiesta o de quedarme en casa
viendo la televisión en una cama demasiada ancha para mí.
Me pregunto dónde estás en mis domingos de resaca, o las
tardes de esos mismos días que parecían años.
Quiero saber cómo te llamas, si estás lejos en estos momentos,
si eres de cerveza o de tinto, o si algún día nos encontraremos y dónde.
Me intriga cómo y de dónde serás.
Si como ya me ocurrió, te encontraré al abrir una puerta.
O si no te encontraré jamás.
Qué harás los 14 de febrero y si lo pasas acompañada.
Si te irás una vez te conozca un tiempo y si volverás alguna
vez.
Si te quedarás para siempre a dormir junto a mí para verte
cada día amanecer.
Me pregunto cuáles serán tus amigos, tus aficiones o si te
gusta el café con leche.
Si ahora mismo compartes lecho con otra persona.
Si ahora mismo compartes lecho con otra persona.
A veces, por preguntar, me pregunto si existes…
Comentarios
Publicar un comentario